Condenaron a una falsa médica de Santo Tomé

certificado medicoLa denunció el Colegio de Médicos de Santa Fe, luego de detectar un certificado con datos apócrifos. La defensa y el fiscal acordaron tres años de prisión condicional para Cristina Diakakis, pero el juez rebajó la pena a dos años en suspenso. Fuente. El Litoral – 18 de agosto de 2016.

 

 

 

 

 

Una falsa médica, que trabajó en un sanatorio de Santo Tomé durante el verano de 2015 fue condenada -mediante la modalidad de juicio abreviado- a la pena de dos años de prisión en suspenso por los delitos de "ejercicio ilegal de la medicina" y "estafa".

 

Cristina Victoria Diakakis, de 33 años, cursó la carrera de Medicina hasta el tercer año en la Universidad Nacional de Rosario, pero no existe constancia de que haya completado su formación académica allí, ni en ninguna otra casa de estudios del país. Sin embargo, el 6 de febrero de 2015, el Colegio de Médicos de Santa Fe (1a. Circunscripción) radicó una denuncia en su contra, por el presunto delito de "ejercicio ilegal de la medicina" ante el Ministerio Público de la Acusación.

 

La maniobra denunciada fue descubierta gracias a una mujer que acudió el 1º de febrero a la guardia del Sanatorio Santo Tomé SA de la ciudad homónima donde trabajaba Diakakis, quien -bajo un supuesto cuadro de gastroenteritis de la paciente- le extendió un certificado para faltar al trabajo por 48 horas. La paciente, que es empleada pública, acudió al Colegio de Médicos el 3 de Febrero para realizar el estampillado correspondiente, donde se constató que el nombre de la profesional no correspondía a un matriculado de la provincia y que el número de matricula pertenecía a otro médico.

 

Recetas y diagnósticos

 

Además de la denuncia penal, la entidad que congrega a los profesionales de la salud de Santa Fe notificó la situación al sanatorio Santo Tomé SA exigiendo el cese de las prestaciones; y notificó al resto de las instituciones sanatoriales de la región para que tomen los recaudos necesarios.

 

Según consta en la carpeta judicial, la mujer había confeccionado un curriculum vitae para ingresar al sanatorio, consignando datos falsos que no fueron advertidos por la empresa de salud, y al ser descubiertos ocasionaron su inmediato despido.

 

Si bien existe una larga lista de personas que fueron atendidas por Diakakis -la sentencia consigna más de 200 nombres-, el Ministerio Público de la Acusación circunscribió la prueba a los días 19, 23, 24 y 26 de enero de 2015 y 1º de febrero del mismo año, en las instalaciones de 25 de Mayo 2028 de Santo Tomé.

 

El fiscal Andrés Marchi señaló que "durante esos días (Diakakis) se desempeñó sin títulos, prescribiendo recetas al menos a diez personas que se atendieron por la guardia", y "realizando diagnósticos" sin el aval correspondiente.

 

Rebaja de pena

 

Si bien en sentido amplio se la acusó por "delitos contra la salud pública", la calificación penal formulada por la fiscalía refería a las siguientes figuras: "ejercicio ilegal de la medicina"; "usurpación de títulos u honores"; "falsificación ideológica en grado de tentativa"; y "defraudación" en concurso real.

 

El fiscal Marchi había logrado un acuerdo de condena a tres años de ejecución condicional para Diakakis, a través de su defensor particular, el abogado Héctor Tallarico. Sin embargo, el juez Nicolás Falkenberg, a cargo de homologar el juicio, corrigió la calificación legal y bajó la pena a dos años de prisión en suspenso.

 

En el fallo, que está fechado el 27 de junio de 2016, Falkenberg suprimió el delito de "falsificación ideológica de documento público en grado de tentativa", por considerar que ni la imputada reviste la calidad de funcionaria, ni el certificado extendido es valedero como documento público, por lo que la absolvió por ese delito. Asimismo recalificó el hecho como "ejercicio ilegal de la medicina y estafa", ésta última en perjuicio de la entidad empleadora que mediante un ardid -falsa documentación- fue engañada en su buena fe.

 

"Es un caso aislado"

 

El presidente de la Mesa Directiva del Colegio de Médicos de Santa Fe, el Dr. Carlos Alico, se mostró conforme con la decisión judicial de dictar condena para quien fuera descubierta ejerciendo la medicina de manera ilegal, no obstante aclaró que lejos de ser una práctica común, "es un caso aislado".

 

"No teníamos una denuncia previa, fue descubierto por el Colegio, ante una certificación que podía ser apócrifa", relató el directivo local. A partir de allí "se iniciaron las investigaciones y se hicieron las denuncias pertinentes" que estuvieron a cargo del departamento jurídico de la entidad.

 

La denuncia penal fue formulada por su antecesor, el Dr. José María Albrecht, "en uso de las atribuciones que la Ley Provincial 3.950 le confieren a este colegio para el control de la matrícula de los profesionales del arte de curar", según indica un comunicado de prensa del año pasado.

 

Se realizaron consultas en la Universidad Nacional del Litoral y la Universidad Nacional de Rosario, donde se comprobó que la persona involucrada había cursado estudios hasta tercer año de la carrera de Medicina en la facultad del sur provincial. Pero que no tenía matrícula habilitante otorgada por el Colegio de Médicos de Santa Fe, tanto de la 1a. como la 2a. Circunscripción.

 

Afortunadamente "en este momento, gracias a la gestión del Colegio no hemos tenido más este tipo de inconvenientes", ya que "el poder de policía es constante y permanente en toda la provincia". No obstante "recomendamos (a las empresas de salud) que cuando tomen personal se comuniquen con el colegio, para asegurarse sobre la veracidad de la matricula de ese profesional", destacó Alico.

 

Autor: Juliano Salierno – Diario El Litoral