“No tendrían que morir tantas mujeres por cáncer de mamas”

En el marco de la sexta edición de la "Noche de los Museos" el Colegio de Médicos de Santa Fe presentó un video sobre el uso de mamógrafo y la prevención del cáncer de mamas. El trabajo surge a partir de la donación de un equipo marca Keleket efectuada por la filial local de LALCEC. Para el director médicos de la entidad, Dr. Roberto Tosolini, se trata de un instrumental irremplazable para las tareas de diagnóstico.

 

 

 


El Museo del Médico de Santa Fe se propone generar un puente entre la historia de la medicina en Santa Fe y las necesidades de información de estudiantes, profesionales y el público visitante.


Siguiendo esta línea de trabajo, a partir de la donación de un antiguo mamógrafo, utilizado durante muchos años por LALCEC Filial Santa Fe para la realización de mamografías, se presentó en la reciente edición de "La Noche de los Museos" un video informativo sobre el rol de estos equipos en la prevención del cáncer de mamas.


En el caso que nos ocupa, se trata de un equipo denominado "Senographe CGR" fabricado por la empresa norteamericana Keleket en la década de 1960.


Estos aparatos disponen de tubos de emisión de rayos X especialmente adaptados para conseguir la mayor resolución posible en la visualización de las estructuras internas de la glándula mamaria. Esta exploración diagnóstica de la glándula mamaria se denomina mamografía.


Según explicó el director médico de LALCEC Santa Fe, Dr. Roberto Tosolini, "el mamógrafo es un equipo irremplazable para la detección del Cáncer de Mamas".


Tosolini señaló que "las pruebas y exámenes de detección tienen el propósito de encontrar la enfermedad en las personas que no tienen ningún síntoma. Mientras más temprano mejores son las probabilidades de que el tratamiento tenga éxito".


La técnica mundialmente aceptada para la detección del Cáncer de Mamas es la mamografía, que consiste en una radiografía de las mamas, capaz de detectar lesiones en estadios muy incipientes de la enfermedad. La dosis de radiación empleada es mínima, por lo que resulta inofensiva.


Las autoridades sanitarias y las sociedades científicas recomiendan que todas las mujeres mayores de 20 años se realicen un autoexamen de mamas cada mes, y a partir de los 35 años, es recomendable hacer una mamografía por año.


Con este puente entre pasado y presente de la medicina queremos valorar el aporte de este instrumento de diagnóstico que ha permitido salvar miles de vidas. Porque la mamografía sigue siendo el mejor método para detectar tempranamente el Cáncer de Mamas.